Durante el año 2022, la gestión de la seguridad en Bogotá se enfrentó al regreso definitivo de la vida de ciudad a su funcionamiento ordinario. Aunque al final del año diera la impresión de que los años en los que las restricciones de movilidad y el confinamiento causados por la intensificación de la protesta y el vandalismo se habían superado, el balance dejar ver que estos llegaron para quedarse.
El gran reto en 2023, el último año del gobierno, será hacer de la mejora de la seguridad en la ciudad una tendencia sostenida, en medio de un escenario confuso en el que el nuevo gobierno nacional no logra definir una política pública de seguridad y ha abierto un proceso de desestructuración de las instituciones de seguridad.
Dos factores que presionan hacia la disminución de la capacidad operacional y el debilitamiento del desarrollo estratégico de las fuerzas policiales que ya estamos viendo.
En este reporte se presenta la proyección estratégica de la seguridad, la convivencia y la justicia en Bogotá – Región en 2023, se proponen las claves para la gestión de la seguridad urbana y se plantean alertas tempranas sobre factores de riesgo a la estabilidad.
