Este año la Secretaría Distrital del Movilidad de Bogotá implementó una serie de medidas con el fin de mejorar las condiciones de tráfico y de movilidad de la ciudad. Entre las disposiciones de la autoridad de transporte, se puso en marcha una estrategia de recaudo por externalidad como un instrumento referente de gestión de la demanda en el mediano y largo plazo, que contribuya significativamente a la racionalización y moderación del uso del vehículo.

Este ejercicio, en una primera fase, se centró en realizar un análisis del impacto de la medida de cobro por externalidad para proponer recomendaciones que optimicen esta disposición al establecer una unidad de cobro asociada directamente a los kilómetros recorridos, especificaciones técnicas del vehículo y por sectores de la ciudad, entre otras. Asimismo, analizar nuevas opciones de pago con una transaccionalidad inmediata y accesible para los usuarios.

Como resultado de este ejercicio, se recomienda que la unidad de cobro que aborda de manera más efectiva la realidad de la ciudad y toma en cuenta los criterios de equidad, es la híbrida. Esta alternativa ofrece el mejor balance entre atender las externalidades (seguridad vial, congestión, y emisiones), no incentiva el uso intensivo del vehículo y asegura una mejor certidumbre del recaudo porque el usuario conocería exactamente qué es lo que está pagando por su recorrido en tiempo real.

Para lograr la implementación de este esquema híbrido de cobro por externalidad asociado al nivel tarifario, a la congestión y a las emisiones de gases contaminantes, se desarrolló una solución tecnológica basada en los resultados que se obtuvieron en cuatro aspectos: análisis de tráfico, análisis del cobro por externalidad vigente, la ubicación de cámaras de control de tránsito en puntos estratégicos y en rutas no cubiertas, y la priorización por fases de un proyecto piloto para el cobro de externalidad con esta metodología.

La solución tecnológica consiste en una aplicación y se contempla una hoja de ruta con los pasos propuestos para desarrollar la implementación de esta alternativa tecnológica que busca racionalizar el cobro por las externalidades causadas por el uso del vehículo; es decir, por cuánto contamina y por cuánto congestiona cuando se moviliza en la ciudad.