Confianza para construir seguridad
Foto: Milton Díaz A pesar de que varios indicadores de seguridad han mejorado la percepción de inseguridad es alta. El gobierno de Bogotá se ha propuesto generar seguridad desde la construcción de confianza; una apuesta interesante para consolidar una ciudad sostenible. No obstante, construir confianza y disminuir el miedo no depende exclusivamente de las dimensiones ordinarias de seguridad – lucha contra el crimen y seguridad ciudadana-. A pesar de que varios de los indicadores de seguridad han tenido mejoras en los últimos años, la percepción de inseguridad se ha mantenido alta. El 58% de los encuestados por la Cámara de Comercio de Bogotá en la Encuesta de Percepción del II semestre de 2019 consideraba que la inseguridad en la ciudad aumentó.
Ni los bogotanos están equivocados, ni las autoridades están mintiendo. La percepción de seguridad se construye con la experiencia que los ciudadanos tienen en la vivencia diaria de su entorno familiar, laboral y urbano. Es un reflejo del disfrute de sus derechos y la realización de su proyecto de vida. Esto se puede apreciar en la encuesta de la CCB, en la que 4 de las 5 razones principales de inseguridad en el transporte público no tenían nada que ver con vigilancia o crimen. Así pues, el propósito del Plan de Desarrollo que busca “inspirar confianza y legitimidad para vivir sin miedo” necesita de un trabajo integral y coordinado en múltiples dimensiones como urbanismo, información pública, gestión local, justicia y seguridad, servicio al ciudadano y corresponsabilidad de la población.
En 2019, un estudio desarrollado por el Observatorio de Mujeres y Equidad de Género de la Secretaría de la Mujer identificó que las barreras de visibilidad en el espacio público representaban un alto riesgo de sufrir una agresión para las mujeres encuestadas. En la encuesta de la CCB, tan solo el 18% de los ciudadanos indicó usar el servicio de atención pública 123 y de esos el 54% se sentía insatisfecho con la atención. A su vez, la encuesta de percepción “Bogotá Cómo Vamos” de 2019 indicó que un 70% consideraba baja la probabilidad de sanción por la comisión de un delito y el 41% aceptable dar una golpiza a un delincuente.
Para generar confianza, es necesario que los ciudadanos perciban un gestión efectiva y oportuna de sus problemas, así como la superación definitiva del deterioro de infraestructuras, servicios o fenómenos localizados. También que reciban información adecuada y útil para la toma de decisiones, disminuyendo las frustraciones rutinarias, la indefensión en lo personal e institucional y la vulnerabilidad en el espacio público. Una Bogotá confiable exige más que la lucha contra el crimen. Debe contar con una estrategia integral y multidimensional que entienda a los bogotanos en su compleja relación diaria con la ciudad y sus habitantes. Que defina un futuro deseado más allá de los indicadores de homicidios, hurtos y denuncias. Esa será la única forma de generar confianza y construir seguridad sostenible. Columna: César Andrés Restrepo Florez
Director Seguridad Urbana ProBogotá Región